Ventilación filtrada: mejora la calidad del aire de tu oficina

En zonas con gran afluencia de personas siempre existe el riesgo de que se propaguen a través del aire ambiental elementos nocivos causantes de enfermedades como micropartículas, alérgenos, bacterias y virus, contaminación… Por eso es importante valorar cómo se van a ventilar esos espacios.

¿Qué aspectos se pueden cuidar en los centros de trabajo?

• Renovar periódicamente el aire: abrir las ventanas o instalar un sistema de ventilación mecánico en las instalaciones.
• Utilizar material lo más inocuo posible para evitar olores fuertes: la acumulación de estos olores se transmite a través del aire y su circulación.
• Evitar la aparición de humedades: ventilar adecuadamente las instalaciones para evitar la aparición de moho.
• Elegir bien el mobiliario de oficinas y espacios compartidos: colocar materiales de decoración como moquetas o telas puede incidir en la calidad del aire.
• Disponer de sistemas de regulación de temperatura independientes para cada estancia. Así se puede elegir la temperatura y tener en cuenta el número de personas presentes: para una correcta climatización, cada estancia debe contar con sus propias condiciones ambientales específicas.

Se recomienda llevar a cabo un mantenimiento de los filtros del sistema de ventilación para asegurar el correcto funcionamiento en función del espacio de la oficina, el número de personas trabajadoras y la actividad del negocio.