— CLIENTES MANTENIMIENTO
Una forma de contribuir a la sostenibilidad es el uso de energías renovables en tu climatización, como la geotermia y la aerotermia. La diferencia entre ambas es cómo se suministra la energía, pudiendo ser del subsuelo o del aire, y de ello dependerán sus ventajas y desventajas.
La climatización es un sistema eficiente que ofrece calefacción y refrigeración a una estancia. Sin embargo, es importante tener en cuenta las distintas variables y condiciones del lugar que quieres climatizar.
A continuación, te contamos que factores influyen y cuáles son las diferencias entre la geotermia y aerotermia, para que sepas cuál elegir. Además de diferentes consejos para darle un uso adecuado y mejorar su rendimiento.
Primero hay que destacar que la geotermia y la aerotermia son sistemas basados en energías limpias que trabajan con bombas de calor para hacer un intercambio térmico. Con un origen energético en la tierra o en el aire, según corresponda. El funcionamiento tiene una fase de extracción de energía y otra de transferencia para dar calor o frío. Sin embargo, el tipo de bomba empleada es distinta. Para la geotermia es de tipo tierra-agua y para la aerotermia puede ser de tipo aire-agua o aire-aire.
Ambas modalidades nos aportan bienestar y son amigables con el medio ambiente por su ahorro energético y por la reducción de emisiones CO2. Pero también plantean ciertas cuestiones que no son fáciles de valorar y que dependen del lugar donde vayamos a situarla.
Una bomba de calor geotérmica capta el calor del subsuelo a través de un circuito instalado a 10-15 metros bajo tierra. Las tuberías enterradas se mantienen a una temperatura constante y contienen un refrigerante que circula y absorbe el calor. Con la bomba el calor incrementa hasta el nivel requerido, y el mecanismo es invertible según las necesidades. Posteriormente se transfiere, mediante un intercambiador al sistema de aire.
Los beneficios de optar por este sistema es que tiene unos costes de mantenimiento bajos, su vida útil es larga y se pueden evitar los ruidos molestos. Además, no rompe la estética del edificio porque esta oculta.
En la aerotermia el proceso de climatización empieza con la extracción de calor del aire exterior a través de un evaporador, donde el refrigerante absorbe el calor exterior y se evapora. El refrigerante pasa, en estado gaseoso, al compresor para aumentar la presión y el calor. Después se transfiere mediante el condensador al sistema de calefacción o refrigeración. Su operatividad por captación de calor depende de las condiciones climáticas y del grado de humedad del aire.
Este sistema tiene varias ventajas: su instalación es sencilla y no hace mucho ruido mientras funciona.
La medición de la eficiencia de la climatización depende de la energía proporcionada por el sistema y del consumo energético para su funcionamiento. Su métrica principal es el COP, coeficiente de rendimiento, que a mayor valor numérico mayor es su eficiencia. La eficiencia energética de ambos sistemas se basa en la diferencia de temperatura entre la fuente y el sistema de climatización. En este caso, cuanto menor sea, menor será la energía consumida.
El valor del COP es el número de unidades de calor capaz de producir por cada unidad de electricidad consumida. El rendimiento de la geotermia y la aerotermia oscila entre el 3 y el 6. Los valores normales son de 5 para la geotermia debido a que la fuente térmica no tiene muchas fluctuaciones y la temperatura es más cercana a la que se quiere obtener en el interior. En la aerotermia, el rendimiento oscila entre 3 y 4, por la variabilidad de la temperatura en el exterior. Su eficiencia es mayor cuando las temperaturas son moderadas.
Aun así, ambas climatizaciones requieren una mínima cantidad de energía auxiliar y el consumo energético es muy eficiente comparándolo con el resto de sistemas.
La climatización nos ayuda a crear un espacio agradable. Su instalación nos brinda confort, ya que adecua la temperatura, la humedad y filtra el aire para mejorar su calidad.
Sin embargo, el clima tiene implicaciones en el funcionamiento de la geotermia y la aerotermia, sobre todo si nos vamos a los extremos de calor y frío. Los cambios bruscos de temperatura demandan a la bomba de calor mayor trabajo, para mantener una temperatura confortable en el interior.
En el caso de los climas muy fríos, la geotermia tiene una ventaja por su fuente de energía, el suelo, que a gran profundidad retiene el calor y las temperaturas varían de forma leve. En la situación opuesta de calor extremo ocurre lo mismo.
Con temperaturas moderadas, los papeles de la geotermia y la aerotermia se invierten si hablamos de efectividad. La puesta en funcionamiento de la aerotermia es óptima y se suele recomendar en climas templados o en temporadas intermedias del verano o invierno.
Las características predeterminadas para el montaje de ambos sistemas son desiguales, sobre todo por el factor del espacio que se necesita. La instalación de la climatización de geotermia requiere una extensión amplia para la colocación de un circuito de sondas refrigerantes. Sin olvidar que lo óptimo es que se encuentre por debajo de los 15 metros para ser eficiente. Para ello se necesitan pozos de unos 100-150 metros de profundidad y es necesario contratar a una empresa especializada. Su instalación es más compleja y cara en comparación con la aerotermia.
La instalación de la aerotermia es similar a la de un aire acondicionado A/C o cualquier calefacción, sin muchas complicaciones. Como otros sistemas, necesita una unidad en el exterior de la vivienda para la obtención de calor del aire.
Si bien estos sistemas son duraderos y su vida útil supera los 20 años, no están exentos del mantenimiento. Hacer revisiones regulares contribuye de forma positiva a su operatividad y rendimiento. De forma que la inversión inicial de la instalación se amortiza.
En general la climatización por geotermia tiene mayor durabilidad que la aerotermia. La climatización por geotermia no está expuesta al entorno adverso y a cambios climáticos y los materiales tienen un deterioro lento. Sin embargo, la aerotermia necesita una supervisión regular.
Por otro lado, también influyen factores operacionales. A mayor demanda de uso y carga de trabajo del sistema, menor vida útil. Por ejemplo, las temperaturas extremas exigen mayor capacidad.
La correcta instalación de las bombas de calor puede proporcionar una vida útil de 20-25 años para la aerotermia y de 30 años para la geotermia.
Recuerda que, pese a las ventajas y desventajas de la geotermia y la aerotermia, lo que prima para elegir una u otra son las necesidades específicas y las condiciones del entorno.
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